En esta pintura, el color y la línea, de cualidades constructivistas, forman, junto a la palabra escrita, una trama de significados cruzados y simbólicos que reflejan un proceso de investigación con el lenguaje.
Desarrollo que queda también patente, por otra parte, en las series de imágenes en las que enigmáticos personajes establecen diálogos mudos a través de alfabetos de números y letras.